10.1.11

Yo nunca hago cosas de este tipo

A mí no me gustan los resúmenes de todo un año. Siempre se cuela algo. Y quizás también te hace recordar cosas que prefieres que se queden en ese año y no pasen al siguiente. Pero, 2010 me ha traído dos regalos enormes, enormísimos, gigantescos. Que ocupan tanto que no puede imaginárselo nadie.

La Señorita Loli encabeza la lista. Es la más sabia de las oyentes. La más conocedora de mis inquietudes y la más perfecta de las tranquilizadoras. Y sobre todo, por encima de cualquier cosa, me entiende. Mejor que nadie. Sabe lo que quiero y cómo lo quiero. No tiene nada que no desee ni nada que deteste. Es GENIAL, tal cual.
Y La Gran Jessi la segunda (y no por ello peor). Es lo más monoso, tierno, bonico, abrazable y adorable del muuuuuuuuuuuuuuuuuuundo. Te derrites con ella. Y siempre te cuenta cosas, cosas, cosas y más cosas y te enseña a escuchar. Es tan gratificante estar a su lado una simple tarde. Te sube tantísimo la moral verla sonreír. Es la única que conozco que tiene claro lo que quiere y siempre acaba consiguiéndolo. Y por eso y por LOST, que le da muchísimos puntos a favor, es lo más parecido a la TERNURA EN PERSONA.
Y también, aunque ya estuviesen conmigo desde antes de este pasado 2010. Mi Queridisísima María y mi Súper Artista Isa. Son simplemente lo mejor. Lo mejor de lo mejor. Las mejores tardes tienen su etiqueta. Las mayores risas y los mejores momentos son de su propiedad. Y no hay cosa que más me alegre que eso. Son ÚNICAS, y punto.

Llegado a este punto, sólo me queda decir que... no todo es de color rosa. Y nunca mejor dicho, que ironía. Se me fue lo más querido por una tontería. Lo más perfecto y genial de todo. Se me fue la literatura color gris. Los sábados de césped. Una gran pérdida por dos grandes ganancias y aún así siento que no me compensa.

Veo mi 2010 como una función de teatro, así, tal cual. Empieza la obra: en algunos actos entran personajes nuevos, en otros actos los personajes se van, en otros actos hay personajes que siempre permanecen, y en el más importante de los actos, el amante del protagonista muere. Y fin. ¿Ha sido buena la obra? ¿O ha sido pésima? Eso ya que lo juzgue el público. Y los críticos, sobre todo, los críticos.

Querido 2010, te quedas en un "indefinido" rotundo.

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Sabes? Me gustaría saber que dijiste.

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  3. No sé ni por qué comenté.
    Preferiría que no le dieses importancia.

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