18.11.11

Ya había olvidado que esto servía para desahogarse

Esto... como decirlo... sobro. Y lo sé. Sé que no tengo nada que hacer ya, que por mucho que quiera no encajo; soy como la pieza del puzzle que no encaja porque es de otro puzzle. Lo tengo asumido desde hace un tiempo, tan sólo hay que fijarse un poco y darse cuenta. Algunos incluso ya lo han hecho, quizás los únicos que merecen la pena. Esto ha llegado a un punto de no retorno, ya no hay salida. Bueno si la hay, pro me asusta bastante la idea de tener que salir de esto de esa manera.
Vale que a veces soy rarita, pero los espíritus libres tenemos eso, no nos conformamos, queremos más. Descubrir mundo, apasionarse por las cosas, buscar lo diferente, sentirse vivo. Y quizás ahí está el problema. Ya no me siento viva, no me siento realizada, me siento como apartada, siento que todos tienen su sitio menos yo aquí. Siento, siento siento, y que más dará ya a estas alturas lo que yo sienta...
A partir de ahora toca ignorar lo que sienten todos, refugiarse en uno mismo y fingir que este puzzle es el tuyo. Aunque tú sepas que no es así.

22.8.11

Sigue siendo la misma de antes

sigue igual de cabezota. siguen gustándole los grupos de música poco conocidos, amaral y la música de bandas sonoras. sigue escuchando música de piano todos los días. sigue llenando libretitas con letras, fotos, dibujos y demás. sigue deborando series, películas y libros. sigue siendo una apasionada del lilafú, del azul electrico y de cualquier azul (y del violeta). sigue enamorada de las moleskine. sigue con su 350D y loca perdida por la fotografía. sigue pasando horas y horas viendo fotos incansablemente. sigue maravillándose cada vez que ve el universo y las miles de galaxias y estrellas que hay en él. siguen encantándole las nueve artes (arquitectura.danza.escultura.música.pintura.literatura.cinematografía.fotografía.historieta.) y le pierden la pintura y la fotografía. sigue soñando con ser arquitecta. sigue gustándole el queso. sigue fascinada con madrid y sigue soñando con ella todos los días. su sueño sigue siendo vivir en madrid. sigue con su memoria pez y su memoria fotográfica. sigue recordando todo lo que dejó atrás y sigue preocupándose por lo que se dejará más adelante. sigue siendo insegura pero decidida a la hora de tomar decisiones. sigue conociendo gente nueva y conociendo más a otra ya conocida. sigue pensando que la humanidad no tiene remedio. sigue siendo mujer de ciencia y no de fé. sigue sin creer en supersticiones. sigue disfrutando a cada minuto que pueda aunque no cuadre con sus planes. se le sigue poniendo la piel de gallina cuando se acuerda de ti.
sigue siendo la misma de antes, aunque tú ya no estés para verlo.
sigo siendo la misma de antes

24.3.11

Puedo contarte tantas cosas sobre mí.

Podría contrarte que me muero cada vez que oigo tu nombre, que dos sílabas me deshacen enteramente en cero coma. Puedo contarte tantas cosas sobre mí... como que todavía guardo todos los bocetos que nos dábamos el uno al otro, o como que sigo teniendo aquella foto de los dos en Madrid colgada en la pared. Me sabría a poco contarte todo lo que se ha instalado en el hueco que dejaste en mi cabecita. Que si nostalgia de los viernes con paraguas, que si alegría y melancolía a la vez por ver nuestros vídeos haciendo payasadas, que si angustia por el nudo que se me hacía en el estómago cada vez que de decías en broma "Me voy..." (y quien imaginaría lo grande que se haría ese nudo, tanto que me dejó taponada), que si los nervios del primer día, que si el amor que dejaste en un post-it a tu nombre, que si las risas bajo sábanas... Todo se ha juntado y pesa más que yo, y se me hace todo cuesta arriba. También podría decirte lo muchísimo que te he echado de menos, lo que dolía cuando se me clavaba la soledad entre las costillas y me costaba respirar, los botecitos que he llenado con lágrimas que huelen a ti...
Podría hacer una lista con todas las coas pendientes que nunca llegamos a hacer y todas las que podríamos haber llegado a hacer, una lista más larga que tu pelo, que en enredaba en tus caderas y parecía más bonito aún.
Podría hacer todo lo posible, lo imposible y aún más inspirándome en ti, en todo lo que me diste y en todo lo que me quitaste. En todas esas cosas sobre mí que en realidad hablan de ti, pequeña Didi.

17.1.11

Y que me miren mal

Fotografía. F-o-t-o-g-r-a-f-í-a.
"El arte de captar lo que otros no ven"
Casi un año ya con ella, incansable compañera. Y es que la fotografía permanece siempre. La cámara nunca te deja de hablar, nunca te reprocha nada, nunca se enfada, nunca te miente, nunca se niega a nada; siempre está ahí, SIEMPRE. No se cansa de abrir y cerrar el obturador. De abrir y cerrar el diafragma. De cambiar el ISO a cada foto. No le molesta que cambie de modo veinte veces en la misma foto, ni que la suba y baje del trípode, ni que la lleve a Málaga, Madrid, Valencia, Albacete o a la esquina del pasillo: me sigue.
Quita mis penas como si de una medicina se tratase. Los peores y mejores momentos los guarda su sensor. A través de su objetivo ha visto lágrimas, risas, muecas, caras, paisajes, cielos, personas, tristeza, alegría infinita, amor y desamor, luces, sombras y oscuridad, ojos de todos los colores, duda, astucia, diversión, aburrimiento, odio, magia...
Incontables tardes de desesperación me ha librado del abismo.
Sinceramente, no me veo sin ella. Me ha cambiado el punto de vista y la orientación. Es salir por la calle y ver millones de fotos posibles, rincones donde hacer una sesión, atardeceres que te reconcomen porque no llevas la cámara encima, edificios que me gustaría construir y luego hacerles fotografías, paisajes que nadie ve bonitos. Andar por la calle con una cámara es descubrir miles de cosas que antes no veías; detalles que buscas en tu composición y en los que antes, por prisas simplemente, no te fijabas.
La vida a través del ocular se ve genial.
Y creo que, por fin he logrado entender qué es lo que siente una persona que vive para la música. Me abrieron los ojos hace un par de días. Bueno más bien me los abrió un libro, todo hay que decirlo.
Decía: "El negativo es la partitura, la copia es la obra"
Y que me miren mal por compararme con los músicos, así lo siento yo.

10.1.11

Yo nunca hago cosas de este tipo

A mí no me gustan los resúmenes de todo un año. Siempre se cuela algo. Y quizás también te hace recordar cosas que prefieres que se queden en ese año y no pasen al siguiente. Pero, 2010 me ha traído dos regalos enormes, enormísimos, gigantescos. Que ocupan tanto que no puede imaginárselo nadie.

La Señorita Loli encabeza la lista. Es la más sabia de las oyentes. La más conocedora de mis inquietudes y la más perfecta de las tranquilizadoras. Y sobre todo, por encima de cualquier cosa, me entiende. Mejor que nadie. Sabe lo que quiero y cómo lo quiero. No tiene nada que no desee ni nada que deteste. Es GENIAL, tal cual.
Y La Gran Jessi la segunda (y no por ello peor). Es lo más monoso, tierno, bonico, abrazable y adorable del muuuuuuuuuuuuuuuuuuundo. Te derrites con ella. Y siempre te cuenta cosas, cosas, cosas y más cosas y te enseña a escuchar. Es tan gratificante estar a su lado una simple tarde. Te sube tantísimo la moral verla sonreír. Es la única que conozco que tiene claro lo que quiere y siempre acaba consiguiéndolo. Y por eso y por LOST, que le da muchísimos puntos a favor, es lo más parecido a la TERNURA EN PERSONA.
Y también, aunque ya estuviesen conmigo desde antes de este pasado 2010. Mi Queridisísima María y mi Súper Artista Isa. Son simplemente lo mejor. Lo mejor de lo mejor. Las mejores tardes tienen su etiqueta. Las mayores risas y los mejores momentos son de su propiedad. Y no hay cosa que más me alegre que eso. Son ÚNICAS, y punto.

Llegado a este punto, sólo me queda decir que... no todo es de color rosa. Y nunca mejor dicho, que ironía. Se me fue lo más querido por una tontería. Lo más perfecto y genial de todo. Se me fue la literatura color gris. Los sábados de césped. Una gran pérdida por dos grandes ganancias y aún así siento que no me compensa.

Veo mi 2010 como una función de teatro, así, tal cual. Empieza la obra: en algunos actos entran personajes nuevos, en otros actos los personajes se van, en otros actos hay personajes que siempre permanecen, y en el más importante de los actos, el amante del protagonista muere. Y fin. ¿Ha sido buena la obra? ¿O ha sido pésima? Eso ya que lo juzgue el público. Y los críticos, sobre todo, los críticos.

Querido 2010, te quedas en un "indefinido" rotundo.